Oda a Neruda

Negra, terrosa, telúrica, te quiero... 
                                                   Temuco. 
Poesía que naciste de las raíces del árbol; 
                            más abajo, 
                            del mar azul de verdes lechos 
que eran ojos sinuosos,

sugerentes formas de un viejo cuaderno. 


Poesía          mujer              eres, 
mujer transformada en poesía, 
gestos de aire que se disipan con la edad 
instantes de amor que perduran en la eternidad, 
manos de dulce tacto que juegan con cabellos rizados 
sueños que se esconden bajo el manto 
de tu aún     virgen          encanto. 
Mujer que     amas          siempre. 
                ¡Ámame!. 


Negra, terrosa, telúrica, te quiero... 

                     fuiste principio de ti misma 
tortuosa belleza, 
                     mágica construcción 

de conchas, mascarones y recuerdos... 



Poesía fraternal Neftalí, 
                                rey de ti mismo 

y de tus palabras. 



Señor de Temuco, 
náufrago en dulces labios, 
amante del amor, 
                          abrupta costa 

                          imposible acantilado.


Te quiero porque eres negra, terrosa, telúrica; 
poesía de conchas, mascarones y recuerdos, 
palabras vivas en mi oscuro destierro. 

                      Neftalí 

Por toda tu poesía te quiero. 

Mujer de encendidos ojos, 
                                    tus palabras... 
mujer de negros cabellos, 
                                    tus versos... 

Miguel Ángel Alonso Diz