Si tienes una madre

Si tienes una madre todavía
Da gracias a Dios que te ama tanto,
Que no todo mortal contar podría
Dicha tan grande ni placer tan santo.

Si tienes una madre… se tan bueno
Que ha de cuidar tu amor su paz sabrosa,
Pues la que un día te llevó en su seno
Siguió sufriendo y se creyó dichosa.

Veló de noche y trabajó de día
Leves las horas en su afán pasaban,
Un cantar de sus labios te dormían
Y al despertar sus labios te besaban.

Enfermo y triste, te salvó su anhelo
Que solo el llanto por bien querido
Milagros supo arrebatarle al cielo,
Cuando ya el mundo te creyó perdido.

Ella puso en tu boca la dulzura
De la oración primera balbucida,
Y plegando tus manos con ternura
Te enseñaba la ciencia de la vida.

Si acaso sigues por la senda aquella
Que va segura a tu feliz destino,
Herencia santa de la madre es ella,
tu madre sola te enseñó el camino.

Mas si al cielo se fue… y en tus amores
Ya no la harás feliz sobre la tierra,
Deposita el recuerdo de tus flores
Sobre la fría losa que la encierra.

Es tan santa la tumba de tu madre,
Que no hay al corazón lugar tan santo:
Cuando espina cruel tu alma taladre,
Ve a derramar ahí tu triste llanto.

Catalino Galdamez